A DIOS ROGANDO...

Los obispos vascos protestan por un reportaje de EL MUNDO TV

Las diócesis de Bilbao, San Sebastián y Vitoria emitieron ayer un comunicado conjunto para protestar por el reportaje En el nombre del padre, producido por EL MUNDO TV y emitido en Antena 3 el pasado jueves. El texto expresa el «malestar» de la Iglesia vasca por el -a su juicio- «uso inmoral de los medios de difusión social, que en nada ayuda a la construcción de la paz en

la verdad, en la justicia y en la libertad».

El documental, para cuya realización dos reporteros se sirvieron de la técnica de la cámara oculta, desvela las opiniones de algunos sacerdotes vascos sobre el terrorismo de ETA y sus relaciones con la banda. Por ejemplo, recoge un testimonio del ex obispo de San Sebastián José María Setién en las que se refiere a los presos de ETA como «las otras víctimas».

El comunicado de los obispos muestra su «indignación por el modo alevosamente manipulador en el que ha sido realizado y presentado» el reportaje; su «repulsa por la carencia de los más elementales principios de ética periodística»; su «denuncia ante el atropello de derechos y deberes fundamentales en el proceso informativo: el conocimiento de la identidad real de los entrevistadores y del verdadero objetivo de los encuentros solicitados y concertados, ocultado premeditadamente a los afectados recurriendo a la mentira», y su «solidaridad con las personas tan injustamente tratadas».

La dirección de EL MUNDO TV respondió a la Iglesia vasca con un escrito en el que recuerda que «los tribunales de justicia españoles han amparado el uso de la cámara oculta y la ocultación de la condición de periodista de los autores siempre y cuando se demuestre que el tema investigado sea de interés social, la información veraz, que sea un hecho denunciable, y que exista proporcionalidad entre la transcendencia de la información obtenida y el daño que, naturalmente, se produce a los derechos personales de los investigados». EL MUNDO

Que el nacional-catolicismo vasco, fundamentalismo religioso de Ikurriña y txistu, ha sido y es amparador de la metralleta criminal no sorprende a nadie.

Sus pastorales desde la transición hasta la fecha no tienen desperdicio y sus acciones (como negarse a que entrara en su propio funeral el féretro de un policía asesinado mientras fuera cubierto con la bandera española) lo dicen todo.

La cámara oculta consigue ratificar una verdad a gritos. Con la Iglesia hemos topado y son la misma escoria los obispos que ponían palio al Dictador como estos mequetrefes que engloban en el término víctima al penado por asesinar y al asesinado.

A la vez que las Escrituras, en los seminarios vascos la otra lectura de cabecera son los “pensamientos” de Sabino Arana, integrista religioso por antonomasia “Dios, Patria y Fueros”.

Ahora se ofenden por que se les vea el plumero por televisión, y hablan de «construcción de la paz en la verdad, en la justicia y en la libertad».

Su verdad: El catecismo Sabiniano.

Su justicia: El tiro en la nuca.

Su libertad: La libertad de sus presos.

Tristemente es cuestión de marketing para la feligresía. En el centrípeto Madrid Rouco y en la periferia separatista “Los Otros”.

Bienaventurados los incrédulos porque de ellos será el reino de los cuerdos.

1 comentario :

Caty Cordero dijo...

La cámara oculta consigue ratificar una verdad a gritos. Con la Iglesia hemos topado y son la misma escoria los obispos que ponían palio al Dictador como estos mequetrefes que engloban en el término víctima al penado por asesinar y al asesinado.

Totalmente de acuerdo contigo. La frase "A dios rogando..." nunca ha sido más cierta, por desgracia. Y es que parece mentira que a lo largo de la historia la Iglesia siempre se haya caracterizado por proteger a los asesinos.